La utilización del lenguaje, con su carga positiva o negativa, influye en nuestra percepción de la realidad, condiciona nuestro pensamiento y define nuestra visión del mundo.
Otras cuestiones que es preciso identificar, toda vez que conforman y promueven las conductas de desprecio sistemático sufridas por los distintos grupos excluidos o discriminados, son los estereotipos y los prejuicios.
En México. La ley federal para prevenir y eliminar la discriminación determina que los órganos públicos deberán establecer medidas compensatorias que propicien el acceso igualitario a oportunidades de las mujeres, niños, niñas personas con alguna discapacidad, personas mayores de 60 años e indígenas.
Pero no debemos dejar a un lado las personas con preferencia sexuales diferentes, personas adictas, en situación de extrema pobreza y personas con enfermedades terminales o contagiosas.
Debemos restringir los actos de persecución, tratos crueles, inhumanos y degradantes e incluso crímenes por odio hacia alguna persona o grupo en particular.
Cabe señalar que algunas cuestiones propician este tipo de faltas morales como:
Ø Cuando no existen políticas públicas que promuevan la igualdad de oportunidades y el ejercicio de los derechos para todas las personas.
Ø Cuando se carece de instrumentos jurídicos que protejan los derechos humanos de todas las personas; o cuando, por el contrario, existen leyes, códigos y reglamentos que en sí mismos son discriminatorios.
Ø Cuando la procuración, impartición, administración y acceso a la justicia no se da en igualdad de circunstancias para todas las personas.
Ø Cuando dentro del hogar no existe igualdad de oportunidades, de trato, de división de tareas, de beneficios, etc., para todos los integrantes o cuando algún miembro de la familia ejerce violencia o abuso, restringe o niega derechos a otros integrantes de la familia.
Ø Cuando se condicionan las relaciones interpersonales a intereses determinados por prejuicios, estereotipos o estigmas que conducen a la comisión de actos discriminatorios, a la marginación y a la exclusión.
Ø Cuando se refleja la actitud discriminatoria que se genera desde el hogar y se fortalece en las relaciones interpersonales en el núcleo social, escolar, laboral y comunitario que rodea a cada persona.